
Flora
Amapola

Es mayo y es tiempo de amapolas. Sin duda, es una de mis flores preferidas. Cuando veo la primera que nace en cada primavera la inmortalizo en una fotografía. Aunque últimamente prefiero dibujarla.
Hay 50 tipos diferentes de amapola y no todas son rojas, Las hay naranjas, amarillas, blancas, lilas y violetas. Pero hoy hablaremos de la amapola roja, conocida como rosella en catalán, rosolaccio en italiano... Todos estos nombres hacen referencia a su inigualable rojo.
Como hermanas pequeñas de la adormidera (de la que se extrae el opio) las amapolas tienen compuestos interesantes, pero no tan peligrosos como los de su hermana. la adormidera. Esta contiene 24 alcaloides conocidos, siendo el más importante la morfina, denominado así en homenaje a Morfeo, dios griego del sueño. Su uso está reservado para la medicina. La amapola común también es narcótica, pero ligeramente, pues no contiene morfina. En su lugar contiene readina, también presente en el opio. La readina tiene un efecto narcótico suave y no es adictiva.
Otros usos de esta planta son: como remedio medicinal suave en caso se tos. Para ello se realiza una tisana con los pétalos o con la flor entera y se endulza con miel. La OMS recomienda el consumo de las semillas de amapola. Se las considera como una semilla oleaginosa por ser muy rica en ácidos grasos. Y podemos utilizar las semillas para realizar un exfoliante facial como te muestro en la sección de cosmética natural de este mes.
Su color rojo ha simbolizado la sangre a lo largo de la Historia: en el cristianismo era símbolo de la sangre de Cristo, derramada en los campos de trigo con que se elabora el pan de la eucaristía; es la flor que simboliza los caídos en la Primera Guerra Mundial y se usa en países de habla inglesa en el Día del Armisticio, en conmemoración de los muertos en conflictos armados.
Son plantas muy delicadas y efímeras, por lo que bien vale salir a pasear y buscarlas en los campos no cultivados, en las cunetas y en los lugares más inverosímiles, ya que sus semillas son transportadas por el viento a tejados y huecos.

